Como ya es habitual, el domingo anterior a la Noche Buena, la Asociación de Hijos y Amigos de Alcalá realizó la subida al Monte Ecce Homo a poner el Belén.
Este año celebramos el décimo aniversario y pudimos comprobar que cada año son más lo seguidores que fielmente acuden a la cita, previamente anunciada en diversos medios de comunicación, sin importarles las adversidades climáticas que puedan presentarse. Ya sea con frío, lluvia o nieve, todos subimos con ilusión y cantando los cánticos propios de estas fechas.
Aunque el día amaneció oscuro y con unos nubarrones en el cielo bastante amenazantes, a las nueve de la mañana, un grupo de caminantes salimos desde la Plaza de Cervantes, afrontando con buen ánimo el frío y fuimos a encontrarnos con un nutrido número de personas que nos esperaban en el aparcamiento del Parque de los Cerros.
Salida de la plaza de Cervantes
Durante
la subida hay tres pronunciados repechos, pero el más empinado es el último,
convertido en estrecha senda a través de la que alcanzamos los 836 metros que tiene la
cima.
Por
suerte, el sol, oculto por las nubes, comenzó a surgir de vez en cuando y hasta
llegó a lucir totalmente. Como la temperatura no era muy baja, pronto los
caminantes comenzaron a quitarse ropa de abrigo para quedarse más ligeros.
El
Parque de los Cerros es un espacio público protegido con gran riqueza de fauna
y flora. Para realizar nuestra subida atravesamos este Espacio Natural en el
que predominan matorrales, coscojos, encinas, tomillos, romeros, retamas,
espartos, encinas y pinos.
La
pista cruza profundos y bellos barrancos erosionados a través de los años por
las lluvias torrenciales.
Una
vez arriba, procedimos a instalar el Belén sobre las ruinas de una de las ermitas
que tuvo en tiempos pasados esta alta meseta. Es Eliseo quien como todos los
años monta el Belén con gran cariño y primor y nos dirige a todos unas palabras
rememorando el día que tuvimos la idea de comenzar con esta práctica emulando a
los senderistas de Guadalajara que cada año suben a poner su belén al Pico
Ocejón.
Aunque
el Belén es de paternidad napolitana, traído a España por el Rey Carlos III que
había sido antes Rey de Nápoles ya es una tradición aceptada y muy querida por
todos los españoles a los que nos gustas mezclar lo religioso y lo popular en
su composición.
La
marcha de hoy así los demuestra, habiéndose convertido en una cita ineludible
para muchos alcalinos, con la que damos comienzo a las Fiestas Navideñas.
Eliseo
nos alienta a continuar haciéndolo y después, con la lectura del capítulo II
del Evangelio de San Lucas, nos recuerda
el momento de la Natividad.
Seguidamente
cantamos todos juntos ante el portalito, nuestro repertorio de villancicos
acompañados de todo tipo de instrumentos musicales y dirigidos por Alberto con
su guitarra.
Arriba en el cerro donde reinaba un silencio
acentuado por un impetuoso viento, todos
llenamos de voces y risas la tranquilidad del espacio.
Finalizada
la marcha, los caminantes y amigos del Burgo de Osma que nunca faltan a la
cita, fuimos a comer un suculento cocido al restaurante “El Chiscón de Alcalá”
donde dieron por terminada la fiesta.
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