Visita cultural a Belmonte y Villaescusa de Haro

El día 24 de mayo a las 7:30 , salimos con dirección a Belmonte y Villaescusa de Haro, dos localidades de la provincia de Cuenca que nos deparaban gratas sorpresas.

Comenzamos la visita a Belmonte a las 10:30, visitando su magnífico castillo, donde nos esperaba Lourdes , que fue nuestra guía durante toda la jornada. En una proyección que vimos al llegar nos contaron la historia de la villa y del castillo.

La villa de Belmonte fue donada por el rey Fernando III el Santo a su hijo el infante D. Juan Manuuel, autor del conocido libro “El Conde Lucanor”, que escribió algunos de sus libros en el palacio conocido como Alcalzar viejo, que se encuentra intramuros de la villa, cerca de la Colegiata aunque en avanzado estado de deterioro. En 1388 el rey enrique III de Castilla dona la villa de Belmonte a Juan Fernández Pacheco que se convierte en el primer señor de Belmonte estableciendo mayorazgo sobre el territorio. Hereda el señorío su hija María Pacheco, siendo el hijo de ésta Juan Pacheco, el primero en asumir el mayorazgo. En 1445 el rey Juan II, por méritos de guerra, le nombra marqués de Villena.

El actual castillo fue construido entre 1456 y 1472 por D. Juan Pacheco siendo una obra gótico mudéjar. D. Juan Pacheco cede el castillo inacabado a su hijo Diego López Pacheco, quien al apoyar al bando de la hija de Enrique IV (Juana la Beltraneja) en la guerra de sucesión al trono entre Isabel la Católica y Juan, pierde temporalmente la propiedad. Poco después la ya reina Isabel la Católica le devuelve sus propiedades.

Después de varios siglos y tras pasar por diferentes manos, el castillo de Belmonte en el siglo XIX pasa a ser propiedad del condado de Montijo. Eugenia de Montijo ( esposa del emperador de Francia Napoleón III) se encargó de su rehabilitación  que se hizo siguiendo esquemas franceses. Actualmente pertenece a la familia Fiz-James Stuart.

Recorriendo las dependencias del castillo, pudimos apreciar los diferentes periodos de su uso y admirar sus detalles arquitectónicos y artísticos que nuestra guía nos fue explicando de forma amena e instructiva, haciéndonos ver las diferencias entre los distintos estilos artísticos del contenido, techos dinteles de puertas y ventanas cuadros, mobiliario etc.

Terminada la visita al castillo hicimos un recorrido por el caco histórico viendo los principales edificios y monumentos: restos de la plaza mayor, en otro tiempo porticada con columnas de piedra,  lo que fue el convento de San Francisco, el colegio de Jesuitas, casas señoriales, las tres puertas que quedan de sus murallas, etc., terminando la mañana visitando la recreación de una casa del siglo XV, donde nos explicaron cómo se vivía en esta época en una casa de una familia noble.

Después de comer, visitamos la Colegiata de San Bartolomé. La mandó construir el Marqués de Villena sobre otro templo más pequeño.

Es una iglesia gótica de tres naves separadas por gruesos pilares, mas trece capillas laterales. Contiene numerosas obras de arte, como  la pila bautismal donde fue bautizado Fray Luis de León, que nació en Belmonte en 1528, la sillería del coro, que fue instalada aquí procedente de la catedral de Cuenca y que lleva talladas escenas de la biblia, el retablo barroco de la capilla Mayor y los sepulcros de la familia del marqués de Villena.

Terminamos la jornada visitando Villaescusa de Haro,  villa que destaca por su patrimonio arquitectónico y muy especialmente por el religioso. Visitamos la iglesia de San Pedro del siglo XVI que posee grandes tesoros arquitectónicos y mobiliarios destacando  sobre todo por la joya de Villaescusa de Haro: la Capilla de la Asunción. Esta impresionante representación del gótico isabelino tiene una planta cuadrada reducida a octógono mediante trompas y una magnífica bóveda estrellada. Todo en ella sobresale, el monumento funerario, el retablo, la reja y los arcos góticos por los que se accede a la iglesia,  que son de una  gran   belleza..

En la arquitectura civil destaca  el Colegio Universitario o Universidad non nata, ya que se construyó para ser la universidad pero el proyecto se frustró con la inauguración de la Universidad de Alcalá de Henares, y quedó como casa particular, es de estilo renacentista primitivo. Actualmente en este edificio hay una casa rural que muy amablemente nos enseñaron las personas que la  regentan.